Un caso reciente ha llamado la atención del personal médico por la agresividad y rápida evolución de una infección meningocócica en un joven de 18 años, que desarrolló púrpura fulminante, una complicación poco frecuente y potencialmente mortal asociada a la meningococcemia.
La púrpura fulminante es una forma grave de infección bacteriana que provoca trombosis intravascular y necrosis cutánea hemorrágica, con una mortalidad que puede alcanzar entre el 18 % y el 40 % en la fase aguda. Aunque suele presentarse en lactantes, los casos en adultos son extremadamente raros y se documentan principalmente en reportes clínicos.
El paciente, previamente sano, consultó tras cuatro días de fiebre, malestar general, diarrea, sangrado nasal y dolor intenso en las extremidades. Al momento del ingreso hospitalario, se encontraba somnoliento, taquicárdico, hipotenso y con signos de insuficiencia respiratoria.
Durante la evaluación médica, se observaron extensas lesiones purpúricas y hemorrágicas en el tronco y extremidades, además de necrosis seca en manos y pies. Los análisis revelaron leucocitosis, coagulopatía y disfunción hepática y renal. Los cultivos de sangre confirmaron la presencia de Neisseria meningitidis, el agente responsable de la meningococcemia.
El paciente fue trasladado a la unidad de cuidados intensivos (UCI), donde recibió antibióticos de amplio espectro, soporte vasopresor y ventilatorio, además de hidrocortisona intravenosa.
Aunque la infección fue controlada, las lesiones cutáneas progresaron, lo que obligó a realizar una amputación transtibial bilateral y la amputación de las falanges distales de ambos manos.
Los especialistas señalan que la púrpura fulminante secundaria a meningococo debe sospecharse ante la aparición de lesiones purpúricas o ampollas hemorrágicas de rápida evolución acompañadas de signos de falla multiorgánica.
La detección y el tratamiento temprano son cruciales para mejorar el pronóstico, aunque incluso con manejo intensivo, la enfermedad suele dejar graves secuelas o conducir a la muerte.
