Las infecciones de transmisión sexual (ETS) son una preocupación de salud pública que no solo afecta el bienestar físico de quienes las padecen, sino también su salud mental y emocional. La Dra. Alice Pérez Fernández, psicóloga clínica y sexóloga, explicó en una reciente entrevista las emociones más comunes que experimentan los pacientes tras recibir un diagnóstico de ETS, así como estrategias para manejar el impacto psicológico y social que esto conlleva.
«Las emociones más comunes incluyen ansiedad, miedo, vergüenza, tristeza y, en algunos casos, negación», explicó la Dra. Pérez Fernández. «La ansiedad se debe a la incertidumbre sobre el tratamiento y el impacto en la vida personal, mientras que el miedo puede estar relacionado con el estigma social y la posibilidad de que la condición no tenga cura».
Además, muchas personas enfrentan dificultades para comunicar su diagnóstico a sus familiares, amistades y pareja, lo que puede agravar sentimientos de soledad y desesperanza. «Es un cúmul emocional complejo que requiere apoyo y acompañamiento», agregó la experta.
Según la Dra. Pérez Fernández, recibir un diagnóstico de ETS puede afectar la autoestima del paciente, haciéndolo sentir que su vida sexual se ha visto limitada o que es menos valioso como persona. «El estigma asociado a las ETS sigue siendo un gran problema. Es fundamental recordar que muchas de estas infecciones tienen tratamiento y que recibir el diagnóstico no define a la persona», afirmó.
Para manejar la ansiedad y el estrés asociados al diagnóstico, la experta recomienda la educación como primer paso. «Es clave aclarar todas las dudas con un profesional de la salud, conocer el tratamiento adecuado y adoptar hábitos que fomenten el bienestar general, como una alimentación balanceada, descanso adecuado y prácticas de relajación como la meditación», destacó.
Asimismo, enfatizó la importancia de buscar ayuda psicológica si el diagnóstico provoca síntomas de depresión, ansiedad extrema o aislamiento social. «Si la persona nota cambios drásticos en su estado de ánimo, patrones de sueño o alimentación, es señal de que necesita apoyo profesional», indicó.
El papel del apoyo social y la comunicación con la pareja
El apoyo social juega un papel clave en el proceso de aceptación y manejo emocional de un diagnóstico de ETS. «Somos seres sociales, y contar con el apoyo de amistades, familiares y pareja es crucial para superar el impacto emocional», explicó la doctora.
Sobre el miedo al rechazo al informar a una pareja sobre el diagnóstico, la especialista sugiere abordarlo con honestidad y empatía. «Cada persona reacciona de manera distinta, pero la clave está en la comunicación y en asumir la responsabilidad sobre la propia salud sexual», señaló.
Para reducir el estigma asociado a las ETS, la Dra. Pérez Fernández aboga por una educación sexual integral. «Las ETS pueden afectar a cualquier persona sexualmente activa, sin importar su edad. La clave está en educarnos sobre salud sexual, practicar sexo seguro y fomentar la comunicación con nuestras parejas», puntualizó.
En Puerto Rico, según el Informe de Vigilancia de las ETS del 2023, se reportaron 1,320 casos de sífilis, 1,126 de gonorrea y 4,095 de clamidia. «Vemos que los jóvenes entre 20 y 34 años son los más afectados. Esto resalta la necesidad de mejorar el acceso a la educación sexual y los servicios de salud», concluyó la especialista.
La doctora enfatizó la importancia de implementar programas educativos, distribuir preservativos y capacitar a profesionales de la salud para abordar este tema de manera efectiva. «Una sociedad mejor informada es una sociedad más saludable», afirmó.
