Con la llegada de las fiestas navideñas, la alegría y la celebración a menudo vienen acompañadas de una tendencia común: comer en exceso. La Lcda. Lilyana Figueroa, nutricionista, nos explica la ciencia detrás de este fenómeno, que involucra una compleja interacción de factores psicológicos, fisiológicos y sociales.
Durante las festividades, las grandes reuniones sociales suelen estar centradas en la comida, lo que puede generar una presión subconsciente para comer. «La expectativa de disfrutar de manjares típicos de esta época, combinada con el deseo de cumplir con las normas sociales, puede llevar a un consumo excesivo», señala la Lcda. Figueroa.
Además, la mentalidad de que la temporada navideña es una ocasión especial puede inducir a las personas a comer más de lo habitual, justificando así el consumo de alimentos que normalmente no forman parte de su dieta diaria. “Las fiestas pueden traer altos y bajos emocionales, lo que lleva a algunos a comer para sentirse cómodos, aliviar el estrés o llenar vacíos emocionales”, menciona la experta.
Los altos y bajos emocionales que acompañan las fiestas también juegan un papel crucial. Muchas personas recurren a la comida como un medio para manejar el estrés, aliviar la ansiedad o llenar vacíos emocionales. «La comida se convierte en una recompensa, un gustito que nos damos después de un año ajetreado. Al comer, nuestro cerebro libera sustancias químicas que nos hacen sentir bien en el cerebro, como la dopamina”, explica la licenciada.
También, las señales de hambre del cuerpo pueden parar gracias a los alimentos con alto contenido de grasa y azúcar pueden causar fluctuaciones rápidas en los niveles de azúcar en la sangre, lo que lleva a una montaña rusa de señales de hambre y saciedad. La Lcda. Figueroa explica que “los estudios han demostrado que cuando a las personas se les presenta una variedad de alimentos, tienden a comer más, incluso si no necesariamente tienen hambre”.
Recomendaciones para dejar de comer en exceso
- Enfócate en la experiencia: Al comer de manera consciente le das tiempo a tu cuerpo para enviar señales de saciedad, lo que puede ayudar a evitar comer en exceso. Elimina las distracciones. Trata de comer sin distracciones como la televisión o los teléfonos. Presta atención a los sabores, texturas y olores de tu comida.
- Control de porciones: Los estudios muestran que el uso de platos más pequeños pueden llevar a consumir porciones más pequeñas sin sentirse mal. Sírvase usted mismo.
- Manténgase hidratado: A veces la sed se confunde con el hambre, lo que lleva a comer en exceso. Mantenerse hidratado puede ayudarlo a sentirse lleno y evitar comer en exceso.
- Manejar el estrés: Practique técnicas de relajación como la respiración profunda, la meditación o el yoga pueden ayudarle.
- Dormir bien: La falta de sueño puede alterar las hormonas que regulan el hambre, lo que hace que sea más propenso a comer en exceso.
Sin duda, comer en exceso durante las fiestas es un desafío común impulsado por diferentes factores. Al comprender por qué comemos en abundancia será más fácil implementar estrategias conscientes para disfrutar de las fiestas navideñas con más control.
