Un grupo de investigadores ha desarrollado un sensor basado en el gusto capaz de detectar la infección por influenza en cuestión de minutos, según un estudio publicado en ACS Central Science. El avance podría representar un cambio importante en la detección temprana de la gripe, especialmente en regiones con recursos limitados.
La investigación, titulada A Viral Neuraminidase-Specific Sensor for Taste-Based Detection of Influenza, propone que el propio sentido del gusto funcione como herramienta diagnóstica. Los científicos diseñaron dos sensores químicos que, al entrar en contacto con la enzima viral neuraminidasa, liberan un compuesto perceptible al gusto, actuando como una señal de infección.
“Diseñamos y optimizamos químicamente moléculas sensibles a la neuraminidasa que liberan un marcador detectable por el gusto, demostrando que estos sensores pueden identificar la actividad enzimática viral en la saliva de pacientes con influenza”, explican los autores del estudio.
Un desafío global persistente
La influenza continúa siendo una de las principales causas de enfermedad respiratoria aguda en el mundo, responsable de unas 500.000 muertes cada año. Aunque las medidas de protección durante la pandemia de COVID-19 redujeron temporalmente su incidencia, el virus sigue circulando estacionalmente, afectando de manera grave a poblaciones vulnerables.
Las pruebas diagnósticas más comunes, como la reacción en cadena de la polimerasa (PCR), son altamente precisas, pero resultan costosas y requieren infraestructura especializada. Esto dificulta su aplicación masiva en países de bajos ingresos, donde el acceso a laboratorios es limitado.
De allí la importancia de desarrollar métodos de diagnóstico accesibles, rápidos y fáciles de aplicar, capaces de identificar incluso a pacientes presintomáticos, quienes pueden transmitir el virus sin presentar síntomas evidentes.
Resultados prometedores
El nuevo sensor fue probado con muestras de saliva de pacientes hospitalizados con diagnóstico confirmado de influenza durante las temporadas 2017/2018 y 2022/2023. Los resultados demostraron que el dispositivo era capaz de responder selectivamente a la neuraminidasa viral sin reaccionar ante su versión bacteriana, manteniendo estabilidad en presencia de saliva humana no infectada.
“Estos hallazgos demuestran que el acoplamiento α-glicosídico del marcador es esencial para el reconocimiento enzimático y la generación de la señal”, señalaron los investigadores.
El sistema logró detectar actividad enzimática en concentraciones similares a las observadas en pacientes con influenza, mostrando una respuesta clara en menos de 30 minutos.
Próximos pasos
A pesar de los resultados alentadores, el estudio no incluyó pruebas en humanos para verificar si las personas pueden percibir el sabor de manera efectiva. Los autores subrayan que serán necesarias futuras investigaciones clínicas para validar esta forma de diagnóstico sensorial.
Si logra aprobar las etapas de validación, este innovador método podría ofrecer una alternativa rápida, económica y no invasiva para la detección de la influenza, con potencial para ser aplicada en entornos domésticos o comunitarios.
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