El liderazgo de la Dra. Lourdes Guerrios, uróloga y pasada presidenta de la Asociación de Urólogos de Puerto Rico (PRUA), marcó un antes y un después en la historia de la organización. En 2023, se convirtió en la primera mujer en ocupar la presidencia, con el firme propósito de promover la participación femenina, la mentoría y el equilibrio entre la vida profesional y personal dentro del campo de la urología.
“El año pasado fui la primera mujer presidente en la Asociación de Urólogos de Puerto Rico. Para mí fue un honor tener esa oportunidad”, expresó la doctora. “Una de las metas principales fue aumentar el número de conferenciantes féminas en el programa, y este año logramos una participación más diversa y enriquecedora”.
Uno de los proyectos más significativos de su presidencia fue la creación de WIPRUA (Women in PRUA), un comité dedicado a empoderar y acompañar a las mujeres urólogas y residentes que inician su camino en esta especialidad quirúrgica.
“La mentoría es clave en cualquier carrera, y en este campo quirúrgico, aún más. Tener a alguien que puedas tener de ejemplo, decir ‘si ella pudo, yo también puedo’, es importante”, destacó. “La diversidad no significa necesariamente equidad, sino que el valor de nuestras aportaciones se reconozca más”.
Actualmente, en Puerto Rico hay nueve urólogas activas, cifra que refleja un avance notable frente a las cinco que ejercían hace apenas una década. En las residencias, el progreso ha sido aún más evidente, las mujeres pasaron de representar el 6 % de los residentes a un 42 %.
“En mi época éramos solo 6 % y ahora son 42 %. Hemos ido abriendo campo en una especialidad fascinante y retante”, señaló.
El equilibrio como herramienta de liderazgo
La Dra. Guerrios reconoce que uno de los mayores retos para las mujeres médicas, especialmente en áreas quirúrgicas, es lograr un balance entre las múltiples responsabilidades profesionales y personales. “Queremos hacerlo todo perfecto, pero también tenemos que pensar en hacerlo de una manera balanceada. Dar lo mejor de nosotras sin perder el equilibrio entre familia, trabajo y pacientes”.
Por eso, WIPRUA busca fomentar habilidades de liderazgo, comunicación y bienestar personal, competencias que, según la doctora, no se enseñan durante el entrenamiento quirúrgico, pero son esenciales para brindar una atención de calidad y mantener una vida profesional sostenible.
Más allá de la técnica, la Dra. Guerrios resalta la importancia del trabajo en equipo y la comunicación interdisciplinaria como pilares del éxito en la práctica médica. “La comunicación es vital para poder resolver problemas y diferencias de opinión. Necesitamos un equipo completo: oncólogos, cirujanos, internistas, radiólogos. Cuando trabajamos juntos, el paciente recibe el mejor cuidado posible”.
Asimismo, enfatiza el rol activo del paciente en la toma de decisiones:
“Ya hoy día no se trata de imponer una decisión, sino de evaluar qué conviene al paciente, entender sus circunstancias y hacerlo partícipe del tratamiento”.
Rompiendo estereotipos: la urología también es para ellas
Con entusiasmo, la doctora invita a más mujeres a considerar la urología como una opción profesional llena de posibilidades. “El campo de la urología es maravilloso. Nos permite ver resultados inmediatos, realizar procedimientos quirúrgicos y establecer relaciones cercanas con nuestros pacientes.
Ese estereotipo de que los urólogos solo ven hombres es falso; tratamos niños, mujeres y varones. Es un campo diverso que ofrece desarrollo profesional y personal”.
Con su liderazgo, la Dra. Lourdes Guerrios abrió camino a una nueva generación de urólogas en Puerto Rico, reafirmando que la representación femenina no solo transforma instituciones, sino que enriquece la atención médica y fortalece el futuro de la especialidad.
“Nuestro objetivo es que las jóvenes urólogas tengan las herramientas y el apoyo que quizás nosotras no tuvimos. Que sepan que no están solas y que, con mentoría y colaboración, pueden llegar tan lejos como se lo propongan”.









