La doctora Esther Alegría, destacada científica puertorriqueña, cuenta con más de 30 años de experiencia en la industria farmacéutica. A lo largo de su carrera, ha liderado equipos y participado en la producción de vacunas, marcando un legado de excelencia y compromiso con la salud pública. En una entrevista con PHLatam, la Dra. Alegría compartió sus motivaciones y reflexiones sobre los cambios y avances en el sector.
La historia de la doctora Alegría comienza en Puerto Rico, donde la industria farmacéutica experimentó un auge significativo en los años 70. “En esos años, se necesitaba mucha mano de obra en las áreas de laboratorios y manufactura. Se desarrolló un programa de dos años para que los estudiantes pudieran entrenarse y comenzar a trabajar en la industria al salir de la escuela superior, y eso fue lo que hice”, relató Alegría.
Este primer acercamiento al sector le permitió descubrir su pasión por la ciencia aplicada a la salud. “Lo que más me impactó fue aprender y entender que lo que yo producía impactaba la salud de mis vecinos, de mi familia, de la comunidad. Ahí se creó un sentido de pasión por estar envuelta en la industria de la salud”, recordó.
Motivada por ese sentido de compromiso, la doctora Alegría decidió continuar su educación más allá de los dos años de entrenamiento inicial para poder participar en la investigación y desarrollo de medicamentos. Este deseo de innovar la llevó a formar parte de la evolución de la farmacéutica moderna.
“Yo quería trabajar en medicinas que no existían en ese momento. Quise alcanzar niveles de educación mucho más altos para poder participar en la investigación de nuevas drogas y medicamentos”, explicó. Esta decisión marcó el inicio de una carrera que hoy cuenta con más de tres décadas de contribuciones y logros.
Durante los últimos 30 años, la industria ha experimentado avances revolucionarios. La transformación de la farmacéutica, sobre la que la experta mencionó el trabajo alrededor de las moléculas pequeñas y la biotecnología, ha sido fundamental. La Dra. Alegría ha sido testigo de estos cambios de primera mano. “Hace más de 30 años, la mayoría de los medicamentos eran productos químicos, moléculas pequeñas”, explicó.
La llegada de los anticuerpos y las proteínas, conocidas como moléculas grandes, marcó el inicio de una nueva era en la biofarmacéutica. “El desarrollo de medicamentos biotecnológicos permitió abordar enfermedades de maneras diferentes y exitosas, manejando condiciones para las que antes no había tratamientos eficaces”, destacó.
Hoy día, los avances más emocionantes están en el campo de la terapia génica. “Estamos desarrollando medicinas que modifican los genes defectuosos. Es un área fascinante que promete tratamientos pioneros para enfermedades genéticas”, afirmó.
“Para mí la visión del futuro en cuanto específicamente a la industria de medicamentos es seguir buscando, innovando en soluciones donde podamos parar la enfermedad por completo o podamos curarla”, finalizó la Dra. Alegría.
La trayectoria de la doctora Alegría es un testimonio de cómo la pasión, la formación constante y el deseo de innovar pueden transformar no solo una carrera, sino la vida de miles de personas a través del mundo.
