Un inusual caso clínico en Tijuana, México, puso a prueba la capacidad diagnóstica de médicos y cirujanos: un hombre de 80 años ingresó de urgencia con dolor abdominal intenso, y lo que inicialmente parecía un posible tumor resultó ser una perforación intestinal causada por una espina de pescado.
El caso fue reportado por el Dr. Daniel Herrera Hernández y colegas del Hospital General Regional No. 1 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Los especialistas destacaron que este tipo de complicaciones son poco frecuentes, pero pueden confundirse con procesos malignos, lo que complica el diagnóstico.
Un dolor que escondía una causa inesperada
El paciente, con antecedentes de diabetes e hipertensión, acudió a urgencias tras 12 días de dolor progresivo en el cuadrante inferior izquierdo del abdomen. Las pruebas de laboratorio revelaron leucocitosis marcada y las imágenes de tomografía mostraron una masa junto al colon sigmoide con características sugestivas de absceso y un pequeño objeto radiopaco en su interior, lo que planteó la posibilidad de un cuerpo extraño.
Durante la laparotomía exploratoria, los cirujanos hallaron la causa del cuadro: una perforación en el colon sigmoide provocada por un objeto punzante de aproximadamente dos centímetros, que resultó ser una espina de pescado.
Se practicó una hemicolectomía izquierda con colostomía terminal, y el paciente evolucionó favorablemente con antibióticos y control metabólico, recibiendo el alta cinco días después.
Diagnóstico complejo y lecciones clínicas
El examen histopatológico confirmó inflamación crónica, pero no halló evidencia de malignidad. Según los autores, la perforación intestinal por espinas de pescado es rara y plantea un reto diagnóstico, ya que puede simular lesiones tumorales o infecciones graves.
Este caso clínico recuerda que, en medicina, lo extraordinario también puede ser real: un simple accidente alimentario puede imitar enfermedades de alta gravedad y cambiar por completo el rumbo del tratamiento.
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