Nuevo colirio abre esperanzas para tratar enfermedades graves de la visión sin necesidad de inyecciones

original web 2025 09 22t175144.784
Un nuevo avance científico promete cuidar la retina sin inyecciones.

Un innovador colirio desarrollado por investigadores de la Universidad RMIT (Australia) ha mostrado resultados prometedores en fases tempranas, al lograr que compuestos protectores lleguen directamente a la retina. Este avance abre la puerta a tratamientos menos invasivos para enfermedades oculares graves como la degeneración macular asociada a la edad (DMAE).

Un problema global de salud visual

La DMAE daña la mácula, la parte central de la retina, y puede llevar a la ceguera. Se estima que cientos de millones de personas en el mundo viven con esta condición, cuyos principales factores de riesgo son la edad, antecedentes familiares, dieta, hipertensión, obesidad y el tabaquismo. Además, la exposición prolongada a la luz azul de dispositivos como teléfonos móviles, computadores y televisores podría contribuir al daño ocular con el tiempo.

El equipo de RMIT, en colaboración con el Centro de Investigación Ocular de Australia (CERA), exploró la administración de luteína, un antioxidante presente en la fruta Gac, para proteger la retina y prevenir el daño celular.

En estudios preclínicos con ratones, la fórmula consiguió llegar a la parte posterior del ojo, actualmente accesible solo mediante inyecciones, y se mantuvo estable durante meses a temperatura ambiente. Además, en pruebas de cultivo celular, la luteína mostró capacidad para proteger las células de la retina frente al estrés y el daño asociados con la pérdida de visión.

Un posible cambio en la práctica clínica

La doctora Dao Nguyen, coinvestigadora principal del estudio, subrayó el impacto que este hallazgo podría tener en la vida de los pacientes.“Las inyecciones oculares frecuentes resultan incómodas y pueden ser angustiantes. Si esta formulación funciona, las personas podrían usar el colirio como medida preventiva para reducir el riesgo de desarrollar estadios avanzados de la enfermedad y disminuir la necesidad de inyecciones”, señaló.

El profesor asociado Tien Huynh, líder del equipo en RMIT, explicó que la plataforma de administración basada en nanocubos (cubosomas) podría adaptarse para transportar diferentes compuestos, no solo luteína. Esta tecnología, patentada por RMIT, actúa como un escudo microscópico que protege los ingredientes activos y los libera de manera controlada dentro del ojo.

Próximos pasos

Aunque los resultados son alentadores, los investigadores advierten que el trabajo se encuentra en una etapa inicial. Los experimentos se realizaron en modelos celulares y animales sin DMAE ni otras patologías retinianas, por lo que no se evaluó un impacto directo en la progresión de la enfermedad. El siguiente paso será avanzar hacia ensayos clínicos en humanos, en colaboración con socios clínicos e industriales, para determinar la seguridad y eficacia del colirio.

El estudio fue publicado en la revista ACS Applied Materials & Interfaces, mientras que una revisión complementaria del grupo, liderada por el doctorando Christopher Olowosoke, destaca el potencial de compuestos vegetales como la luteína para proteger la salud ocular (Pharmacological Reports).

Fuente original aquí 

Últimos artículos