Detectan raro caso de angiosarcoma mamario inducido por radiación tras tratamiento conservador 

original web 2025 10 17t160153.068
Una mamografía reveló una recurrencia local, confirmada por biopsia como carcinoma ductal invasivo. Imagen de caso.

Un inusual caso de angiosarcoma de mama inducido por radiación fue reportado en una paciente que, años antes, había recibido tratamiento conservador y reconstrucción mamaria con colgajo de músculo recto abdominal (TRAM) tras un cáncer de mama. El caso busca alertar a los profesionales de la salud sobre la posibilidad de aparición tardía de este tipo de tumores y la necesidad de un diagnóstico temprano y preciso.

El angiosarcoma radioinducido (RIA) es una complicación poco frecuente pero grave del tratamiento con cirugía conservadora y radioterapia en pacientes con cáncer de mama. Su diagnóstico suele retrasarse debido a su apariencia benigna y similitud con los cambios cutáneos secundarios a la radiación.

Un diagnóstico que tardó años

La paciente, de 56 años, había sido diagnosticada en 2000 con carcinoma ductal in situ en la mama derecha. Fue sometida a cirugía conservadora, disección axilar y simetrización de la mama contralateral, seguida de radioterapia (48 Gy en 26 fracciones durante 46 días).

Dos años más tarde, una mamografía reveló una recurrencia local, confirmada por biopsia como carcinoma ductal invasivo. Se realizó entonces una mastectomía con conservación de piel y reconstrucción inmediata con colgajo TRAM.

Seis años después del tratamiento con radiación, la paciente notó una mancha violácea en el área irradiada. Aunque inicialmente fue interpretada como una hipodermatitis postradioterapia, la lesión creció hasta medir 7 × 5 cm y se acompañó de engrosamiento, picazón y cambios vasculares dérmicos.

Tras varias biopsias y revisiones histopatológicas, se confirmó el diagnóstico de angiosarcoma grado I, positivo para los marcadores CD31 y CD34, sin evidencia de metástasis ganglionar.

La paciente se sometió a una cirugía radical que incluyó la escisión de piel, colgajo y ganglios axilares. Posteriormente, presentó una segunda recurrencia en la cicatriz, tratada con quimioterapia (doxorrubicina-ifosfamida) y sorafenib, logrando una remisión clínica e histológica completa. 

Los autores del informe advierten que, aunque el angiosarcoma radioinducido es poco frecuente, su incidencia podría aumentar debido a la preferencia actual por cirugías mamarias conservadoras seguidas de radioterapia.

Subrayan que el tumor suele aparecer años después del tratamiento inicial, por lo que los médicos deben mantener una vigilancia continua y realizar biopsias amplias ante cualquier lesión sospechosa en zonas irradiadas. 

Fuente: AQUÍ

Últimos artículos