La lucha contra el cáncer avanza en Puerto Rico, impulsada por un esfuerzo conjunto de médicos primarios, enfermeras, y miembros de la comunidad. A pesar de los significativos progresos en la educación y la concienciación sobre la importancia de la prevención y el diagnóstico temprano, persisten diversas barreras que impiden que muchos accedan a las pruebas necesarias. Estas barreras son variadas y pueden depender del género, la ubicación geográfica, la fe, entre otros factores.
La comunidad médica enfatiza que la mejor forma de abordar el riesgo de cáncer es a través de una comunicación clara y accesible y responder a la necesidad de simplificar la información para que los pacientes no se sientan intimidados. «Si lo hacemos muy complejo, el paciente va a decir que eso no le corresponde», menciona la Dra. Marcia Cruz Correa, gastroenteróloga oncóloga..
La accesibilidad a las pruebas es crucial. Los médicos coinciden en que mientras menos invasiva sea una prueba, más probable será que los pacientes se sometan a ella. Por ejemplo, una simple prueba de sangre para verificar niveles de hemoglobina es mucho más sencilla de realizar que una colonoscopía, especialmente para aquellos con antecedentes familiares de cáncer.
Los especialistas también subrayan la importancia del apoyo familiar y social en la búsqueda de atención médica. «Cada uno de nosotros tiene algún amigo o familiar que ha sido afectado por el cáncer. A veces, es a través de esa relación que logramos incentivar a un paciente a hacerse un estudio», explica la Dra. Cruz.
En este contexto, el papel del médico primario se vuelve fundamental. No sólo son responsables de la atención de pacientes con diagnósticos ya establecidos, sino que también juegan un papel clave en la prevención y la detección temprana. «Un paciente no es solo aquel que tiene un diagnóstico, es cualquier individuo que, por su edad, debe acudir al médico primario para una evaluación preventiva», destaca.
Uno de los síntomas más comunes relacionados con el cáncer de colon es el sangrado rectal. Sin embargo, muchos pacientes tardan años en buscar ayuda, lo que puede tener consecuencias graves. «Nunca es normal el sangrado rectal. Puede ser algo benigno, pero también puede ser un signo de algo más serio, como el cáncer», advierte un profesional de la salud.
Por otro lado, se están realizando investigaciones innovadoras que podrían cambiar el paradigma de la detección del cáncer. En el ámbito de la oncología en Puerto Rico, se están preparando ensayos clínicos que permitirán realizar pruebas de sangre en pacientes asintomáticos que se someten a colonoscopías. Esto podría representar un avance significativo en la detección temprana de cáncer de colon.
Mientras estos proyectos avanzan, los expertos recalcan la importancia de la educación y el acceso a la atención médica. «No todos quieren venir a ver al médico, pero es crucial que cada uno de nosotros asuma la responsabilidad de cuidar nuestra salud», concluyen.
Este llamado a la acción resuena en toda la comunidad, recordando que la prevención y la detección temprana son las mejores herramientas en la lucha contra el cáncer. La unión de esfuerzos entre profesionales de la salud y la comunidad es esencial para reducir el impacto de esta enfermedad.