Un reciente estudio clínico ha revelado que la escisión total mesorrectal transanal (TME) es tan efectiva como la técnica laparoscópica en términos de supervivencia libre de enfermedad a tres años en pacientes con cáncer rectal. Este hallazgo es significativo, ya que la TME transanal, aunque ha mostrado ventajas en resultados histopatológicos a corto plazo, ha dejado dudas sobre su eficacia a largo plazo.
El ensayo, conocido como TaLaR, se llevó a cabo en 16 centros médicos en China entre abril de 2016 y junio de 2021, con la participación de 1,115 pacientes diagnosticados con cáncer rectal en estadios I a III. Los participantes fueron asignados aleatoriamente a recibir ya sea TME transanal (558 pacientes) o TME laparoscópica (557 pacientes).
Los resultados obtenidos fueron alentadores: la supervivencia libre de enfermedad a tres años fue del 82,1% para el grupo TME transanal y del 79,4% para el grupo laparoscópico, lo que indica una diferencia del 2,7%. Este margen se encuentra por encima del límite de no inferioridad establecido en -10%, lo que sugiere que la TME transanal es, al menos, igual de efectiva que la laparoscópica en este aspecto.
Además, la recurrencia local a tres años fue del 3,6% en el grupo transanal y del 4,4% en el laparoscópico. La supervivencia general también mostró resultados favorables, con un 92,6% para los pacientes de TME transanal frente al 90,7% en el grupo laparoscópico.
Los investigadores subrayaron la importancia de estos hallazgos, que podrían cambiar el enfoque quirúrgico en el tratamiento del cáncer rectal, permitiendo que más pacientes se beneficien de la TME transanal, que es menos invasiva y podría ofrecer una recuperación más rápida.
En conclusión, los resultados del ensayo TaLaR apuntan a que la excisión total mesorrectal transanal es una opción segura y efectiva para pacientes con cáncer rectal en estadios medios y bajos, ofreciendo una alternativa viable a la técnica laparoscópica, y abriendo nuevas puertas en el tratamiento oncológico a largo plazo.
Con estos prometedores resultados, se espera que futuras investigaciones sigan explorando las implicaciones de la TME transanal, así como su potencial para mejorar la calidad de vida de los pacientes con cáncer rectal.