Un inusual caso de miocardiopatía de Takotsubo periparto fue identificado en una mujer de 32 años luego de someterse a una cesárea de emergencia. El cuadro clínico requirió su traslado a una unidad terciaria de cuidados críticos e insuficiencia cardíaca, destacando la importancia del diagnóstico oportuno mediante ecocardiografía transtorácica (ETT).
El caso clínico
La paciente, primípara de 32 años, fue ingresada para la inducción del parto debido a restricción del crecimiento intrauterino a las 38 semanas de gestación. Sin antecedentes médicos relevantes, el procedimiento quirúrgico transcurrió sin complicaciones iniciales bajo analgesia con Entonox (O2 50%/N2O 20%).
Sin embargo, doce horas después del parto, la mujer presentó disnea persistente y requirió oxígeno suplementario. Ante la sospecha de una complicación cardíaca, se realizó una ecocardiografía transtorácica que reveló una disfunción ventricular izquierda severa, con una fracción de eyección del 20 %.
Los análisis de laboratorio mostraron marcadores inflamatorios elevados y la radiografía de tórax evidenció infiltrados bilaterales, inicialmente compatibles con un proceso infeccioso. No obstante, los estudios cardiológicos posteriores —incluyendo angiografía coronaria por tomografía computarizada y resonancia magnética cardíaca— descartaron enfermedad coronaria, confirmando el diagnóstico de miocardiopatía de Takotsubo periparto.
Una condición poco reconocida en el posparto
La miocardiopatía de Takotsubo es una forma de disfunción ventricular izquierda provocada por estrés físico o emocional intenso, que imita un infarto agudo de miocardio pero sin obstrucción de las arterias coronarias. En el contexto obstétrico, su aparición es rara y probablemente subdiagnosticada.
Los autores del informe enfatizan la importancia de mantener un alto índice de sospecha clínica ante cuadros de disnea o deterioro hemodinámico en el periparto. Asimismo, subrayan el papel fundamental de la ecocardiografía en el punto de atención, una herramienta que permite un diagnóstico rápido y preciso sin necesidad de trasladar a la paciente.
El equipo médico destaca que el abordaje ideal de estos casos requiere la colaboración multidisciplinaria entre obstetras, anestesistas, intensivistas, cardiólogos y profesionales de apoyo como especialistas en lactancia y psicología, para garantizar una recuperación integral y segura.
Fuente consultada: AQUÍ