El conversatorio «Cuidado Integral de la Salud Cardíaca en Puerto Rico: Retos y Soluciones» de PHL reunió a expertos en salud para discutir los retos más apremiantes que enfrenta la isla en el ámbito de la salud cardiovascular, además de explorar posibles soluciones para mejorar la calidad de vida de los puertorriqueños. Durante el evento, se abordaron una serie de problemas clave que están afectando la salud cardíaca en la población local y cómo podemos trabajar juntos para mitigarlos.
Fueron parte del panel los destacados cardiólogos de Puerto Rico, como el Dr. Diego H. González Bravo, el Dr. Jonathan Cordero, la Dra. Zuanette Ramos Robles y el Dr. Juan Nieves, abordaron las múltiples dificultades que enfrenta la sociedad moderna en cuanto a la prevención y manejo de enfermedades cardiovasculares. Durante la charla, los expertos coincidieron en varios puntos clave que afectan la salud pública y destacaron posibles soluciones.
Uno de los puntos más discutidos fue la desinformación médica que circula, especialmente a través de redes sociales, donde muchos mitos y consejos erróneos pueden influir negativamente en la salud pública. Es común que personas que sufren de colesterol alto, por ejemplo, eviten medicamentos necesarios por el miedo a los efectos secundarios. Sin embargo, los expertos coinciden en que los medicamentos para controlar el colesterol son esenciales para evitar complicaciones graves a largo plazo, como ataques al corazón y accidentes cerebrovasculares.
El sedentarismo también se destacó como uno de los factores más críticos que contribuyen a la mala salud cardiovascular en Puerto Rico. En un mundo cada vez más tecnológico, donde el teletrabajo y los dispositivos electrónicos se han vuelto parte del día a día, se ha reducido la actividad física, lo que ha incrementado los casos de enfermedades como diabetes, hipertensión y obesidad. Se hizo un llamado urgente a la acción, subrayando la importancia de incorporar más actividad física en nuestras rutinas diarias, incluso a través de pequeñas acciones como caminar más durante el día o evitar estar sentados por largos períodos de tiempo.
El cuidado preventivo también fue un tema central, especialmente cuando se habló de la prevención de enfermedades cardiovasculares. Se destacó que muchas de las enfermedades cardíacas que actualmente se diagnostican de forma avanzada y en etapas críticas podrían haberse prevenido con chequeos regulares y un seguimiento médico adecuado. Realizarse análisis de colesterol, controlar los niveles de azúcar y revisar la presión arterial son pasos esenciales para detectar problemas a tiempo. Sin embargo, a pesar de la importancia de estos exámenes, muchas personas no buscan atención médica hasta que ya se presentan síntomas graves, lo que aumenta los riesgos y reduce las oportunidades de intervención temprana.
Otro aspecto que no pasó desapercibido fue el alarmante aumento de enfermedades cardiovasculares en personas más jóvenes, quienes ahora son diagnosticados con condiciones graves que antes sólo afectaban a adultos mayores. Los expertos señalaron que factores como la obesidad, la falta de ejercicio y hábitos alimenticios poco saludables están llevando a personas de entre 30 y 50 años a enfrentar serias complicaciones cardiovasculares. Esto demuestra que, incluso si uno se siente bien, no se debe subestimar ningún síntoma, por leve que sea. El mensaje fue claro: la atención médica oportuna y el diagnóstico temprano son esenciales para evitar que las enfermedades cardíacas lleguen a ser irreversibles.
Además de la prevención y el tratamiento, otro tema que surgió fue el acceso a información médica confiable. En un contexto donde las redes sociales están llenas de información errónea, es fundamental que los puertorriqueños busquen fuentes verificadas y confiables, además de consultar regularmente con profesionales de la salud para tener una visión clara sobre el cuidado de su salud cardiovascular. Los especialistas destacaron que los esfuerzos por educar a la población, aumentar el acceso a servicios médicos y fomentar hábitos de vida saludables son fundamentales para frenar la creciente epidemia de enfermedades cardíacas en la isla.
Los especialistas concluyeron con un llamado a la acción, recordando que la prevención y la intervención temprana son cruciales para reducir la incidencia de enfermedades cardiovasculares en Puerto Rico. Los participantes en el evento hicieron un llamado a trabajar juntos como comunidad, a nivel individual y colectivo, para promover una cultura de cuidado preventivo, educación continua sobre salud y el fomento de un estilo de vida más activo y saludable.