La demencia por Alzheimer continúa siendo uno de los mayores retos de la medicina moderna. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 55 millones de personas viven con algún tipo de demencia en el mundo, y el Alzheimer representa entre un 60 y 70 % de los casos.
En entrevista para Public Health Latam, la Dra. Rhaisa Castrodad, neuróloga especialista en esclerosis múltiple, compartió su visión positiva sobre los avances recientes en terapias para esta condición. “Llevamos años sin terapias nuevas para este diagnóstico, así que el tener una terapia que se considera modificadora para la enfermedad, aunque aún no se entienda que el cambio sea tan significativo, sí es esperanzador”, destacó la especialista.
La importancia de detectar temprano
La Dra. Castrodad enfatizó que un diagnóstico temprano abre la puerta a mayores beneficios con los nuevos medicamentos. “Poder detectarlo de forma temprana nos ayuda a tener estas terapias modificadoras de la enfermedad como opción de tratamiento, y se ha visto que tienen un porcentaje un poco más elevado de eficacia en términos de progresión de la condición”, explicó.
Además, recordó que el estilo de vida es clave en la prevención y manejo: “Actividades que estimulen la memoria, más ejercicio, socialización, control de la presión arterial, diabetes y colesterol, así como el manejo de la ansiedad, la depresión y la dieta, todo eso tiene un impacto en el progreso de la enfermedad”.
Los avances más recientes se enfocan en la proteína beta amiloide, una sustancia que se acumula en el cerebro de las personas con Alzheimer. Según la Dra.,“se piensa que estas terapias dirigidas a esa proteína pueden detener la progresión o al menos enlentecerla. Todavía no hay un estudio de cuán beneficiosa es en comparación con otros medicamentos, pero sí se ha visto que el impacto es un poco mayor”.
El objetivo principal de estas terapias es brindar mayor funcionalidad y calidad de vida a los pacientes, retrasando la pérdida de memoria y las habilidades cognitivas.
Un mensaje de acompañamiento
Más allá de los avances médicos, la Dra. Castrodad envía un mensaje de apoyo a los pacientes y sus familias. “No están solos, pueden contar con nosotros como su herramienta de apoyo. Hay un sinnúmero de organizaciones que los apoyan. No se aíslen, busquen ayuda, esa es la clave para poder salir adelante con un paciente con Alzheimer”.
Aunque todavía no existe una cura definitiva para el Alzheimer, el desarrollo de terapias modificadoras y el impulso en la investigación ofrecen esperanza. Como señaló la neuróloga, el camino está en la combinación de detección temprana, prevención y acompañamiento integral, tres pilares que pueden marcar la diferencia en el futuro de esta enfermedad.