En la celebración del vigésimo congreso «Lazos Creando Fuerzas 2024», un centenar de profesionales de la salud se reúne para capacitarse sobre los más recientes avances científicos, con el objetivo de mejorar el bienestar de las personas que viven con VIH en Puerto Rico.
El evento, organizado por Puerto Rico CONCRA, se lleva a cabo en el Hotel Sheraton del Centro de Convenciones en San Juan. CONCRA (Community Network for Clinical Services, Research and Health Advancement) es una organización comunitaria que, desde 1990, ofrece servicios preventivos y de salud especializados en el tratamiento del VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS) a través de su centro de prevención y clínica de tratamiento.
Durante el congreso, se están abordando temas clave relacionados con la prevención del VIH, el acceso a diagnósticos, la vinculación al cuidado y tratamiento, así como las comorbilidades asociadas, según expresó el director ejecutivo de PRCONCRA, Carlos Cabrera Bonet, en una conferencia de prensa.
En este sentido, uno de los temas más relevantes, es que Puerto Rico es uno de los lugares mejor equipados para tratar a pacientes con VIH, brindando acceso a medicamentos sin restricciones según lo necesiten, así lo indicó el Dr. Javier Morales, infectólogo e investigador del virus de VIH en Puerto Rico, quien indicó que aunque existen retos para aquellos con seguros privados debido a altos deducibles, el gobierno ha logrado suplir las necesidades de muchos pacientes a través de programas de asistencia.
“Puerto Rico, yo entiendo es que de los mejores sitios en el planeta que se atiende, aquí el paciente que necesita un medicamento puede conseguirlo. En Puerto Rico no se dice cuál es más caro, sino el que necesitas está disponible”, destacó el Dr. Morales.
Por otra parte, la Dra. Zuleima Rivera, de la Escuela Graduada de Salud Pública, explicó los estudios que adelantan sobre la implementación de la profilaxis preexposición (PrEP) como una estrategia biomédica clave para la prevención del VIH. Sin embargo, subrayó que la promoción del PrEP es insuficiente y debe expandirse más allá de los grupos de alto riesgo.
“En Puerto Rico, aunque la prevalencia de casos de VIH es alta, el uso del PrEP sigue siendo bajo, lo que refleja barreras en su accesibilidad, como trabas burocráticas y cobertura limitada por parte de los planes médicos”, explicó.
Uno de los retos que describió la directora médica de la organización, Ruth Soto Malavé, sobre los estudios adelantados por el equipo de la Dra. Rivera, es la falta de educación sobre el PrEP como un obstáculo significativo, particularmente entre la población femenina y algunos profesionales de la salud, no obstante, no desestimó avances importantes como la disponibilidad de PrEP inyectable, que se administra cada dos y próximamente sería cada seis meses, los cuales prometen mayor efectividad y facilidad en su uso.
El acceso a tratamientos antirretrovirales ha revolucionado el panorama del VIH en Puerto Rico, así lo aseguró el Lcdo. Carlos Cabrera, Director Ejecutivo de PR CONCRA, quien precisó que expertos señalan que hoy en día, un diagnóstico de VIH ya no es una sentencia de muerte, como lo era al inicio de la epidemia en los años 80 y 90. Con los medicamentos actuales, una persona puede alcanzar una carga viral indetectable en solo seis semanas, lo que significa que no puede transmitir el virus a otros.
“No podemos bajar la guardia, no podemos dejar de lado a las nuevas generaciones. Entiendo que debemos seguir educando, y nuestra organización de base comunitaria, no tenemos un rótulo que nos identifique para garantizar un espacio seguro para las personas, porque aún existen muchos estigmas”, dijo el Director Ejecutivo de PR CONCRA.
Es importante mencionar que se estima que alrededor de 15,000 personas viven con VIH en Puerto Rico. Ante los avances en investigaciones y tratamientos, los proveedores de salud se están preparando para implementar nuevos medicamentos y métodos de cuidado que ayuden a reducir la transmisión del virus.
Ante este panorama, dl Dr. Tony Jiménez, quien ha trabajado en la lucha contra el VIH desde el inicio de la epidemia en los Estados Unidos, comentó que el territorio estadounidense se ha fijado la meta de reducir las nuevas infecciones en un 90% para el año 2030. «Es un desafío que creemos posible si todos trabajamos juntos. Puerto Rico es una de las jurisdicciones priorizadas, y debemos unir esfuerzos. La epidemia del VIH no ha terminado, y es crucial que la comunidad lo entienda», señaló Jiménez.
El doctor también destacó que en los Estados Unidos, las infecciones anuales de VIH han disminuido de entre 50,000 y 60,000 casos a 34,000. «Es un logro significativo. Cada nueva infección le cuesta al sistema de salud cerca de medio millón de dólares, lo que significa que al haber reducido 20,000 infecciones, hemos ahorrado alrededor de $10 mil millones. Este esfuerzo conjunto está dando resultados», afirmó Jiménez.