La transición a la menopausia trae consigo una serie de cambios hormonales que pueden influir en el peso y la composición corporal de las mujeres. La Dra. Viviana Sánchez, endocrinóloga, explicó en una entrevista exclusiva para PHL en el día mundial de la obesidad que la relación entre hormonas y obesidad es compleja: «En esta situación no se sabe, como decimos acá, que vino primero, si el huevo o la gallina, si son las hormonas las que influyen en la obesidad o la obesidad en las hormonas».
Sin embargo, la Dra. Sánchez menciona que es un hecho que durante la perimenopausia, la etapa previa a la menopausia, muchas mujeres experimentan un aumento de peso y cambios en sus cuerpos.
Cambios en la composición corporal y riesgos metabólicos
Uno de los cambios más importantes durante la perimenopausia es la redistribución de la grasa corporal, con un aumento de la grasa visceral, que rodea los órganos internos. «Aunque nuestra balanza no esté cambiando, nuestro cuerpo sí está cambiando y nuestra distribución de grasa corporal está cambiando. Y esto sí es debido a los cambios en el estrógeno», señala la Dra. Sánchez. Este cambio aumenta el riesgo de resistencia a la insulina, hipertensión y enfermedades cardiometabólicas.
Síntomas de la menopausia y su relación con la obesidad
Contrario a lo que se podría pensar, las mujeres con obesidad suelen experimentar menos sofocos debido a que el tejido adiposo produce estrógeno. «Una mujer con obesidad tiene mucho tejido adiposo y ese tejido adiposo produce estrógeno.Por lo que, aunque esté perdiendo estrógeno de sus ovarios, tiene estrógeno sistémico por el tejido adiposo y estas mujeres con obesidad presentan menos sofocos», explica la experta.
Sin embargo, la Dra. Sánchez expresa que la fatiga es un síntoma común que puede verse exacerbado por otros factores relacionados con la obesidad, como la mala calidad del sueño.
Por otra parte, la Dra. Sánchez enfatiza la importancia de adoptar un estilo de vida saludable desde temprano, idealmente desde los 35 años, para prepararse para los cambios hormonales de la menopausia. «Debemos estar conscientes de que tenemos que cambiar nuestro estilo de vida antes de llegar a la menopausia. Es básicamente cómo prepararnos para un embarazo», afirma. También, recomienda una dieta balanceada, ejercicio de resistencia para mantener la masa muscular y, en algunos casos, terapia hormonal.
Prevención de la osteoporosis
La pérdida de estrógeno durante la menopausia aumenta el riesgo de osteoporosis, y la obesidad puede exacerbar este riesgo. Por ello, la Dra. Sánchez recomienda el ejercicio de resistencia y mantener un peso saludable para fortalecer los huesos. «Idealmente, deberíamos entrar en buen peso a este periodo perimenopáusico y menopáusico para evitar que esta tendencia de pérdida de densidad ósea, que sabemos que está más que documentada en la menopausia, sea peor», aconseja.
Enfoque individualizado y multidisciplinario
El manejo de la obesidad durante la menopausia debe ser individualizado y puede requerir un enfoque multidisciplinario, que incluya cambios en el estilo de vida, terapia hormonal, medicamentos para la obesidad y, en casos extremos, cirugía bariátrica.
«Hay que trabajar cada síntoma de manera individual y si en algún momento con cambios de estilo de vida, con terapia psicológica y con reemplazo hormonal la paciente no puede perder peso, seguro que trataremos la obesidad como cualquier otro paciente con las herramientas que tenemos al día de hoy», concluye la Dra. Sánchez.