Un reciente caso clínico ha puesto de relieve la presencia de papiloma bucal en un niño de 8 años, subrayando la capacidad del virus del papiloma humano (VPH) para transmitirse de manera no sexual. La madre del menor notó una tumoración en la encía de su hijo, que creció rápidamente en un periodo de 2-3 meses, lo que motivó la consulta médica.
El paciente, que no presentó antecedentes de infecciones por VPH durante el embarazo de su madre ni complicaciones durante el parto, fue diagnosticado con una lesión verrugosa en la encía. La lesión, de 0.8 x 1.3 cm, tenía un aspecto moriforme y color rosado pálido.
Procedimiento diagnóstico y tratamiento
La intervención incluyó una profilaxis dental seguida de una biopsia bajo anestesia local. La muestra histopatológica reveló un papiloma escamoso con cambio inflamatorio, confirmando la presencia del VPH. La escisión quirúrgica de la lesión se realizó con éxito y el paciente mostró una buena cicatrización a los 7 días postoperatorios.
Transmisión vertical del VPH
Este caso resalta la posibilidad de transmisión vertical del VPH, es decir, de madre a hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia. Aunque la madre del paciente negó una infección por VPH durante su embarazo, la literatura médica indica que la transmisión vertical puede ocurrir, especialmente en partos vaginales, donde el bebé puede estar expuesto a secreciones infectadas.
Importancia del diagnóstico precoz
Los profesionales de la salud subrayan la importancia del diagnóstico precoz y el seguimiento continuo en casos de infecciones por VPH en niños, debido al potencial de recurrencia y la necesidad de controlar posibles complicaciones.
Este caso sirve como recordatorio de que el VPH puede afectar a los niños y que la transmisión no sexual es una vía significativa de contagio que debe ser considerada en el diagnóstico y tratamiento de lesiones bucales en pediatría.
La publicación de este caso se realizó en la Revista Científica Multidisciplinar.