En el marco del mes de concienciación sobre la psoriasis, la dermatóloga, Dra. Tania González hizo un llamado a reconocer que esta condición no es únicamente un problema cutáneo, sino que también puede evolucionar hacia un tipo de artritis inflamatoria conocida como artritis psoriásica.
“La psoriasis no es solo una condición de piel, también puede afectar las articulaciones. Una vez el paciente esté educado, debe vigilar zonas de riesgo como el cuero cabelludo, el área genital y las uñas”, explicó la especialista.
La Dra. González detalló que los signos tempranos que deben alertar incluyen dolor, hinchazón articular y molestias en la espalda o rodillas. En niños, un síntoma característico es el llamado dedo en salchicha, cuando uno de los dedos se inflama de forma visible mientras los demás permanecen normales.
Además, los cambios en las uñas —como escamas, coloración anormal o indentaciones— pueden ser una señal temprana de compromiso articular. “Es un factor que predice que el paciente puede desarrollar artritis psoriásica en el futuro”, puntualizó.
Importancia de la detección temprana
La detección temprana, indicó, es clave para prevenir el deterioro de las articulaciones. Sin embargo, uno de los retos principales es que muchos pacientes y médicos subestiman la conexión entre la piel y las articulaciones. “No debemos pensar en esos síntomas como algo aislado, sino como parte del cuadro de la psoriasis”, advirtió.
Tratamiento
En cuanto al tratamiento, la especialista destacó que el enfoque debe ser integral, atendiendo tanto las manifestaciones cutáneas como las articulares. Hoy en día, existen terapias biológicas capaces de bloquear rutas específicas del sistema inmunológico —como las mediadas por interleuquinas 17 o 21— para frenar la inflamación y prevenir daño a largo plazo.
La especialista señaló que el futuro del manejo de esta enfermedad apunta hacia terapias personalizadas según el perfil genético del paciente. “En los próximos años podremos elegir el tratamiento más efectivo dependiendo del genotipo y de las comorbilidades que presente cada persona”, anticipó.
Su recomendación final fue que, ante cualquier lesión de psoriasis, especialmente en áreas de riesgo o síntomas articulares, se debe consultar de inmediato al médico para prevenir la progresión hacia la artritis psoriásica.