Terapia electroconvulsiva: una herramienta vital en el tratamiento de trastornos mentales graves

image 20241004 170100 986
La terapia electroconvulsiva sigue siendo una opción fundamental en la psiquiatría moderna, ofreciendo esperanza a aquellos que no han encontrado alivio con otras formas de tratamiento. Imagen de archivo.

La terapia electroconvulsiva (TECAR) ha recorrido un largo camino desde sus inicios, transformándose en un tratamiento seguro y efectivo para trastornos mentales graves como la depresión severa y la esquizofrenia. 

Aunque a menudo ha sido retratada de manera negativa en películas y medios de comunicación, el TECAR actual es un procedimiento cuidadosamente supervisado que incluye anestesia y relajación muscular, lo que lo convierte en una opción terapéutica mucho más humana y controlada.

En el podcast “Cuida tu Salud” de la Fundación Santa Fe de Bogotá, la doctora Sandra Nieto entrevistó al psiquiatra Dr. Gustavo Perdomo para desmitificar el procedimiento y explicar sus avances. El Dr. Perdomo destacó que, en su versión moderna, el TECAR es un tratamiento clave para aquellos pacientes que no responden a los medicamentos convencionales.

¿Cómo funciona TECAR?

El procedimiento implica la aplicación de una pequeña corriente eléctrica al cerebro a través de electrodos. Esto provoca una convulsión controlada y terapéutica que reorganiza la actividad neuronal, promoviendo un mejor equilibrio en los neurotransmisores. El paciente, sin embargo, no experimenta las sacudidas físicas asociadas con las convulsiones gracias a los relajantes musculares administrados previamente.

El TECAR es efectivo para varias patologías, entre ellas la depresión refractaria, el riesgo suicida inminente, y la catatonía. También es una opción segura para mujeres embarazadas, donde los medicamentos psiquiátricos convencionales pueden no ser recomendables. 

Aunque la terapia ha sido malinterpretada como dolorosa y traumática, hoy en día se realiza bajo anestesia general. El paciente no está consciente durante el procedimiento, y el equipo médico supervisa cuidadosamente la inducción de la convulsión, asegurando una experiencia lo menos invasiva posible.

El TECAR, cuando está bien indicado, tiene una tasa de éxito elevada y puede representar una alternativa valiosa en el tratamiento de trastornos mentales graves. Si bien existen efectos secundarios, como algunos problemas de memoria temporales, la mayoría de los pacientes reportan una mejoría significativa en su calidad de vida.

La terapia electroconvulsiva sigue siendo una opción fundamental en la psiquiatría moderna, ofreciendo esperanza a aquellos que no han encontrado alivio con otras formas de tratamiento. Gracias a los avances en su administración, el TECAR es hoy en día un procedimiento seguro y respetuoso con el paciente, rompiendo con los estigmas que alguna vez lo rodearon.

Últimos artículos