Si estás en sobrepeso u obesidad y tienes dudas acerca de cómo se diagnostica y se trata esta condición médica, debes saber que es necesario abordar varios aspectos para lograr verdaderos cambios en tu salud.
Debido a que la obesidad y el sobrepeso no presentan síntomas específicos, es importante acudir al médico si evidencias que tu índice de masa corporal supera los valores normales establecidos.
¿Cómo se diagnostica la obesidad?
La obesidad generalmente se diagnostica teniendo en cuenta cinco aspectos claves. El primero es la revisión del historial médico donde te preguntarán acerca de tus hábitos alimenticios, nivel de actividad física y antecedentes familiares de obesidad.
Seguidamente, el médico puede medir tu presión arterial, estatura, peso, frecuencia cardíaca y evaluar el abdomen.
El cálculo del índice de masa corporal es el tercer aspecto clave dentro de la evaluación médica. El IMC es una medida que ayuda a determinar si tu peso es saludable en relación con tu altura. Un valor de 30 o más indica obesidad.
Una vez que el médico compruebe que existen indicadores claros de obesidad, puede medir la circunferencia de tu cintura para medir la cantidad de grasa abdominal. Debes saber que esta grasa localizada está relacionada con un mayor riesgo de enfermedades del corazón y diabetes.
La obesidad se puede corregir: principales tratamientos
El objetivo del tratamiento es reducir los riesgos asociados con la obesidad y mejorar tu calidad de vida, según explica el hospital Mayo Clinic. Para eso existen diferentes estrategias que incluyen cambios en el estilo de vida, medicamentos y procedimientos quirúrgicos.
- Cambios en el estilo de vida
Dentro de los cambios en el estilo de vida, la alimentación baja en calorías es uno de los principales, seguido por el ejercicio físico regular. Puedes intentar ejercitarte al menos 150 minutos a la semana.
- Medicamentos
Si los cambios en el estilo de vida no logran controlar la obesidad y disminuir el peso, existen algunos medicamentos que actúan a nivel cerebral como liraglutida y naltrexona/bupropión, regulando la sensación de comer.
También se encuentra el orlistat que actúa a nivel gastrointestinal, impidiendo la absorción de grasas de los alimentos; y la semaglutida, que ayuda a regular la insulina y reduce significativamente el apetito.
- Dispositivos médicos
Dentro de los dispositivos médicos se encuentran los balones gástricos y las bandas que disminuyen la cantidad de alimentos que ingieres, siendo opciones efectivas si has probado otras opciones. Así lo indican los Institutos Nacionales de Salud.
Aunque la obesidad se puede tratar efectivamente con medicamentos y otras opciones quirúrgicas, es indispensable cambiar los hábitos de vida para obtener mejores resultados a largo plazo.