En una entrevista especial para para PHL de Back to School del Puerto Rico Children’s Hospital, la alergista, la Dra. Iona Malinow, alergista e inmunóloga y catedrática del Recinto de Ciencias Médicas en la Universidad de Puerto Rico compartió estrategias clínicas para el abordaje de la dermatitis atópica y otras enfermedades alérgicas en la población pediátrica durante el regreso a clases.
Según la especialista, la dermatitis atópica junto con la rinitis alérgica y el asma, constituye una de las condiciones crónicas más prevalentes en la infancia, afectando aproximadamente al 20 % de los niños en Puerto Rico y a nivel mundial, de acuerdo con datos de la American Academy of Pediatrics (AAP).
“Es una condición crónica que mejora y empeora, y que muchas veces se ve exacerbada por el calor, los uniformes sintéticos y la sudoración”, explica la Dra. Malinow.
Factores de exacerbación en el entorno escolar
La especialista subrayó que los cambios ambientales típicos del calendario escolar, como el aumento de las temperaturas y la exposición a uniformes no transpirables, pueden agravar la sintomatología. “Muchas veces, escribo cartas para que esos niños puedan usar ropa de algodón y continúen con su tratamiento para que las lesiones no empeoren”.
Además, el sudor y las temperaturas extremas, calor o frío, pueden incrementar la inflamación y el prurito, complicando el manejo diario de la enfermedad.
La dermatitis atópica en escolares se caracteriza por lesiones eritematosas y pruriginosas en áreas flexurales (pliegues de brazos y piernas), tobillos, cuello y párpados, igualmente, signos cutáneos asociados al fenotipo atópico como allergic shiners, pliegues de Dennie-Morgan y queratosis pilaris.
La AAP y la National Eczema Association coinciden en que el prurito intenso puede generar insomnio, irritabilidad y lesiones de rascado con riesgo de infección bacteriana secundaria.
Cuidados basados en evidencia para prevenir brotes
La experta brinda recomendaciones clave para manejar condiciones como la dermatitis atópica, asma y rinitis durante el nuevo año escolar, enfatizando los cuidados de la piel en contextos exigentes como calor y uniformes no adecuados.
- Vestimenta hipoalergénica
Ropa de algodón, ligera y transpirable.
Evitar fibras sintéticas y prendas ajustadas.
En caso necesario, solicitar excepciones escolares por escrito. - Higiene cutánea
Duchas cortas (5–10 min) con agua tibia.
Limpiadores suaves sin fragancia.
Hidratación inmediata con emolientes ricos en ceramidas. - Evitar irritantes
Detergentes sin perfume ni suavizantes.
Enjuague adicional de uniformes. - Control ambiental
Mantener ventilación adecuada en aulas.
Uso de fundas antiácaros y control de exposición a mascotas. - Prevención de complicaciones
Uñas cortas y limadas.
Evitar antihistamínicos tópicos como el Benadryl en crema, que pueden sensibilizar la piel. Consultar sobre alternativas a esteroides orales cuando sea posible.
El regreso a clases representa un momento crítico para el control de la dermatitis atópica infantil. La combinación de calor, uniformes inadecuados y exposición a alérgenos ambientales exige medidas preventivas claras, educación a padres y cuidadores, y un seguimiento médico especializado.