Un enfoque integral es esencial en el manejo del paciente con diabetes: Dra. Feliciano

frame fotos notas ph latam (21)
Dra. Melba Feliciano, endocrinóloga y presidenta electa de la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología.

En el marco de la Convención de la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología, la Dra. Melba Feliciano, presidenta entrante de la Sociedad Puertorriqueña de Endocrinología y Diabetología, ofreció una reflexión sobre la crucial necesidad de adoptar un enfoque interdisciplinario para el tratamiento de la diabetes. 

La especialista subrayó que la diabetes no debe ser considerada una enfermedad aislada, ya que conlleva múltiples complicaciones que afectan diversos órganos del cuerpo, lo que requiere la intervención de varios profesionales de la salud.

«Es un tema de vital importancia, porque no podemos ver al paciente diabético de manera aislada. Esta enfermedad afecta diferentes sistemas del cuerpo y, por lo tanto, necesitamos la intervención de varias disciplinas para poder ofrecer un tratamiento completo y efectivo», explicó. «El paciente diabético no solo necesita medicamentos, sino también cambios en su estilo de vida, apoyo nutricional, ejercicio físico y educación continua».

Detalló que el manejo exitoso de la diabetes requiere la colaboración de un equipo multidisciplinario. Este equipo incluye al médico primario, que puede ser un médico de familia o un internista, además del endocrinólogo, nutricionistas, educadores en diabetes, enfermeras especializadas en el manejo de medicamentos, y psicólogos, especialmente para los pacientes más jóvenes que enfrentan dificultades emocionales para aceptar su tratamiento. «La salud mental juega un papel esencial, especialmente en los pacientes más jóvenes, quienes a menudo tienen problemas de aceptación de su control», comentó.

Asimismo, mencionó otros especialistas claves como el cardiólogo, el podiatra, y el fisioterapeuta del ejercicio, quienes juegan un rol vital en la prevención de complicaciones. «Es importante destacar que más del 50% de las amputaciones en pacientes diabéticos son prevenibles mediante el monitoreo constante de los pies y la prevención de infecciones», resaltó.

Sobre la importancia de la comunicación efectiva entre los profesionales de la salud, la Dra. Feliciano aseguró que la integración de registros médicos electrónicos es fundamental para asegurar que todos los miembros del equipo interdisciplinario estén al tanto del tratamiento del paciente y puedan colaborar de manera eficiente. 

«En algunos centros de salud de Puerto Rico ya estamos viendo modelos de trabajo interdisciplinario, donde los profesionales se comunican y trabajan de la mano, lo cual es clave para el manejo integral del paciente», explicó.

Sin embargo, también reconoció que aún existen desafíos, como la falta de centros con este enfoque y la escasez de profesionales capacitados. «El número de pacientes diabéticos está en aumento, especialmente entre los adultos mayores, lo que crea una demanda aún mayor de profesionales y centros especializados. Es un reto constante», dijo.

En cuanto a la prevención, la Dra. Feliciano subrayó la necesidad de mejorar la educación tanto de los pacientes como de los profesionales de la salud. «La intervención temprana y la educación son esenciales para prevenir las complicaciones crónicas de la diabetes. La orientación debe incluir no solo al paciente, sino también a su familia y entorno», señaló. Además, destacó la importancia de incluir a otros profesionales como los odontólogos y farmacéuticos en la educación y prevención.

También abordó el impacto de los determinantes sociales en el manejo de la diabetes, como la falta de acceso a servicios de salud, el costo de los medicamentos, y la falta de apoyo familiar. 

«Estos factores dificultan la adherencia al tratamiento y pueden obligar a los pacientes a tomar decisiones difíciles, como modificar su terapia sin la supervisión adecuada», explicó.

La Dra. Feliciano hizo énfasis en la necesidad de legislación y políticas públicas que respalden la prevención y el manejo adecuado de la diabetes. «En algunos países, como en Latinoamérica, se están implementando etiquetas en los alimentos para advertir sobre su alto contenido de azúcar, lo que podría ser una medida importante en Puerto Rico», sugirió. «Es necesario que trabajemos en estos temas a nivel legislativo para ayudar a reducir los factores de riesgo que contribuyen al aumento de la diabetes en la población.»

Con respecto al futuro, expresó su optimismo sobre los avances en la prevención de la diabetes. «Estamos en el camino correcto, pero aún hay mucho trabajo por hacer. La educación y la intervención temprana son claves, y necesitamos continuar fortaleciendo la colaboración entre todos los profesionales que trabajan en el manejo de esta enfermedad», concluyó.

Últimos artículos